¿Cuál es mi estilo docente?

Llegó la hora de la verdad... ¿Qué tipo de profesora voy a ser o soy?
En clase realizamos un cuestionario que parece fiable (o eso nos dijo el profesor) en el debíamos leer 57 preguntas donde teníamos que elegir entre la opción A o la opción B. Una vez rellena la planilla de diagnóstico de estilo de liderazgo, nos salían unos números que debíamos pasar al gráfico del perfil de estilo según los tipos que establece Redding, que son 8:

  1. Desertor: presenta una baja tendencia a las tareas y a las relaciones, por lo que presenta un rendimiento poco eficiente en un contexto en el que se requiere al menos una o ambas. Esta conducta es, por lo tanto, inadecuada. 
  2. Misionero: este tipo de docente presenta una baja tendencia a las tareas, aunque alta a las relaciones. Esta conducta no es eficiente porque el contexto requiere también alta tendencia a las tareas. 
  3. Autócrata: alta tendencia a las tareas, pero baja tendencia a las relaciones, lo cual provoca que su rendimiento sea también poco porque el contexto requiere también alta tendencia a las relaciones. 
  4. Conciliador: el docente conciliador muestra una alta tendencia tanto a las tareas como a las relaciones, pero en un marco en el que se requiera una tendencia sólo a una de ellas la convierte también en poco eficiente. 
  5. Burócrata: su nivel de eficiencia es mejorable dado que tiene baja tendencia tanto a tareas como a las relaciones, en un contexto en el que sea necesario cuidar tanto las actividades como a las personas. 
  6. Progresista: este estilo se caracteriza por una tendencia baja a las tareas y alta a las relaciones en un contexto en el que la organización así lo requiere, lo cual hace que sea un rendimiento eficiente. 
  7. Autócrata-benevolente: caracterizado por una alta tendencia a las tareas y la baja tendencia a las relaciones, en un contexto en el que la organización así lo pide también, lo cual hace que sea un rendimiento eficiente. 
  8. Realizador: su elevada tendencia a las tareas y a las relaciones hacen que su rendimiento sea eficiente en un contexto en el que la organización así lo requiere, lo cual hace que sea también un rendimiento eficiente.
Después de esto, aquí está mi resultado:

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